Hoy quiero compartir con ustedes una experiencia significativa con la labor docente. Es triste ver como desde estos espacios hacemos llamados a la creatividad, la innovación y sobre todo la vocación docente, mientras en los colegios de la ciudad, tenemos a nuestros hijos en manos de personajes que se dicen "Docentes", pero que se encuentran anclados en el ayer, aferrados a los métodos lapidarios del "yo mando", "yo decido", "yo todo lo puedo". Siento una gran tristeza con aquellos que se dedican a llenar cabezas, con aquellos que aun piensan que los adolescentes de hoy se "manejan" a reglazos y gritos. Hoy escuché de una profesora las siguientes palabras: "yo se que en mi grupo hay 22 drogadictas, pero no pienso hacer nada al respecto, ellas verán, mañana se darán cuenta de los errores que están cometiendo, la vida se los cobrará".... LA VIDA SE LOS COBRARÁ??? a quiénes, a las adolescentes que aun están en un proceso de formación, que apenas están descubriendo su identidad y su horizonte en la vida? o a una profesora que sabe qué está pasando y no piensa hacer nada al respecto? Existen profesores con miles de títulos para poder ascender al escalafón docente, pero que en la práctica definitivamente no hacen honor a su vocación. Ser Docente es ayudar, orientar, educar, reeducar, direccionar y proteger a los jóvenes que la sociedad pone en nuestras manos. Si evidenciamos comportamientos inadecuados, qué debemos hacer? quedarnos con los brazos cruzados y permitir que la juventud se nos pierda en las tinieblas de los vicios y los malos comportamientos?, si no hacemos nada, es como si los empujáramos al vacío... POR DIOS! QUÉ ESTÁ PASANDO, en las universidades hablamos del Docente de hoy... pero aún en nuestros colegios tenemos profesores del ayer, que con su comportamiento, en vez de formar, están permitiendo que nuestros hijos se deformen...
Gracias a mis facilitadores de didáctica, pedagogía y psicología, porque me han llevado a reafirmar mi vocación docente y Dios permita que cuando con mi generación de compañeros de formación lleguemos a las aulas titulados, podamos salvar a los jóvenes que el sistema nos está dejando.
SANDRA PATRICIA LÓPEZ MORA
La problemática que plantea Sandra Patricia es de verdad preocupante, pues la formación debe ser de más calidad en la juventud donde el ser humano se está apenas formando, donde requiere realmente de "maestros" y no de "profesores", es decir, que encuentre en el aula de clase un guía, un orientador, un mentor, un promotor de valores morales, un ejemplo de vida. A esa edad se requiere más de formar al ser humano y luego se le facilita el conocimiento. De verdad que Sandra Patricia nos pone a pensar bastante en este punto débil de nuestro sistema educativo a nivel nacional, lo que es la principal finalidad de este blog. Mis felicitaciones a Sandra Patricia por plantear este coyuntural problema y así dar la posibilidad de fijar la posición personal frente a él.
ResponderEliminarPienso que allí es donde está la dignificación de la profesión docente, porque todos sabemos que nuestros educadores escogieron esas carreras porque eran las mas baratas en las universidades, o porque es la que les asegura un puesto de trabajo hasta que se pensionen, dejando de lado la vocación y la misión encomendada, que veo con tristeza en muchos casos que no se ha entendido o no se ha querido entender, porque es mas fácil hacer las cosas como hasta el momento.
ResponderEliminarAlli está nuestro reto como futuros docentes: no hacer las cosas igual, cambiar de esquemas mentales y hacerlas como debe ser, procurando el desarrollo integral de las conciencia a nuestro cargo y eso solo lo logramos teniendo sentido de pertenencia desde ahora ,como estudiantes, haciendo las cosas por convicción mas que por conveniencia, fortaleciendo nuestra visión y proyectando nuestra labor hacia el avance personal y profesional de todo nuestro entorno
En una situación como la planteada por Sandra, el profesor debe estar mucho más apegado a la visión de Educador: la dignificación de la existencia humana. El llenarnos de conocimientos no nos puede hacer elevarnos, para sobrepasar nuestra realidad y olvidarse de ella.
ResponderEliminarEl profesor es aquel que debe insentivar, motivar, orientar y direccionar la energía, que se refleja en la motivación personal de cada joven.
El profesor de ayer se preocupa primer en la disciplina y la transmisión de información; vaciar contenidos en la cabeza del joven. El profesor de hoy se preocupa por la realidad personal de su estudiante, identifica y analiza las motivaciones y los intereses personales para generar una enseñanza que tenga como objetivo fundametal generar aprendizaje significativo, que en últimas, se oriente hacia la formación integral.